Julio Peña, el deportista que va más allá

Entrevista de perfil - Por Maximiliano Zabalo

Julio Peña Vargas:

Nació en Punta Arenas el 18 de diciembre de 1975. Comenzó sus estudios y afición al ajedrez en el Colegio The British School de Punta Arenas. Se ha formado principalmente en dos aéreas profesionales: Área Deportiva y Área Económico-Financiera. En la primera, cuenta con el título de Técnico Superior en Gestión Deportiva y Supervisor de jóvenes promesas del ajedrez puntarenense destacándose a nivel nacional. Actualmente está cursando en la UDP, la diplomatura en Empresas y Actividades Turísticas, donde afirma que se desempeña de forma armónica y da juicio positivo a su trabajo en aquel cargo, donde mantiene un buen ambiente social con sus pares, que relaciona muy bien con su familia y consigo mismo, afirma

En cuanto a su actividad profesional actual, ejerce como Asesor de Inversionistas en una empresa recién constituida e integrada en el rubro. Menciona con énfasis y alegría, que es uno de los trabajos más cómodos y amenos que pudo encontrar en su vida, ya que al egresar de la universidad estuvo muy preocupado por conseguir un trabajo estable, cómodo, en el cual desarrollará un ejercicio pleno de sus conocimientos como también, no deje de lado a su familia por el trabajo, por el cual afirma que se siente realizado y se compatibiliza plenamente con su personalidad.

Comenzó practicando varios deportes, destacando en el ajedrez ya desde niño en el Colegio Miguel de Cervantes (Punta Arenas), aproximadamente desde los 10 hasta los 14 años. Desde los 14 a los 16 años ingresó a la Academia The King, edad a partir de la cual paso a formar filas del equipo regional de ajedrez de Punta Arenas hasta los 24 años de edad.

Hablar de la Academia The King, donde comenzó su trayectoria en el juego del tablero, para él es hablar de su adolescencia y sus años de mayores logros. Son para él algunos de los recuerdos más bonitos de la infancia y juventud que conserva actualmente con gran cariño.

Menciona que su establecimiento, era un colegio en el que realmente aprendía, en el que podía desarrollarse deportivamente y progresar en cualquiera de las disciplinas que se practicaban. Recuerdo muchos amigos que conservo en la actualidad, incluyendo el profesorado, especialmente a Walter Foglia y a José Luis Sáez, entre otros. Afirma Peña.

“Como he señalado anteriormente la relación con mis profesores era plenamente de respeto, es decir, lo primero hacia la propia persona y lo segundo como docente. Recuerdo que la figura del profesor estaba en un alto lugar, pero siempre hay rencillas entre el alumno y profesor por las calificaciones o como también por la cantidad de libros que nos hacían leer en la enseñanza media, que ahora agradezco la exigencia por partes de esos docentes para mi desarrollo cultural”, comenta Julio peña.

Julio afirma: “Recuerdo muchos libros que nos hicieron leer estos profesores que te mencioné, pero en forma esencial recuerdo “El Principito” de manera positiva, no sólo por las moralejas entregadas en sus líneas, sino por el bagaje de relaciones humanas, de experiencias y vivencias dentro del entorno donde se desarrolla la historia, las cuales te ayudan a saber afrontar situaciones posteriores que encuentras a lo largo de tu vida”.

¿Te acuerdas de algunos pasajes del libro? Como por ejemplo: ¿La relación que tenía la serpiente con el principito?

Algo recuerdo, al parecer se trataba de una "enemistad" útil, es decir, a lo que me refiero es que el principito se deja morder por la serpiente, ya que ella le dice que tiene el poder de regresarlo a su planeta. También recuerdo que el principito se sintió engañado por su flor, ya que esta le había dicho que ella era la única en todo el universo, y al encontrar un rosal lleno de las mismas, se dio cuenta que eso no era, en parte, verdadero.

¿Qué crees que quiere decir el autor con el contenido del libro? ¿Qué mensaje destaca en el libro según tu visión?

Lo considero una crítica al mundo actual, que no sabe distinguir lo que es el amor y la amistad, entre otras cosas, es vivir el día a día, aprender a amar y ser empático con los demás.

Julio nos menciona algo muy importante y significativo: “La verdad el principito es un libro extraordinario, a pesar de que los personajes que se presentan en la historia pueden presentarse para un público infantil, cada uno tiene una gran cantidad de valores y asociaciones al diario vivir, donde se puede rescatar muchas cosas a favor, como también defectos que poseemos nosotros los humanos. Al leerlo dos años más tarde para ayudar a mi sobrino Jorge, volví a sentir que era un libro genial y claramente me sentí muy orgulloso de transmitirle eso a mi sobrino”.

Al preguntarle más acerca de este libro que significó tanto en su vida, nos cuenta que el principito tiene características que ha visto reflejado en el diario vivir, lo cotidiano el ser encantador, inteligente, inocente, niño, curioso y sonriente. Afirma: “Es un libro asombroso… realmente las líneas del principito son una lección de vida”

Julio Peña Escontrela: Nació en Punta Arenas, el 18 de diciembre de 1975.

Está casado y de momento, sin descendencia.
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Mi mejor recuerdo: Todos han sido buenos

El profesor del que mejor recuerdo guardo: Don Felipe

Y del que no quiero acordarme: No hay nadie de quien no quiera acordarme.

Mi equipo de fútbol: Universidad Católica

Disfruto viendo este deporte: Ajedrez, aunque no lo crean (ríe) .

Para practicar prefiero: Ajedrez y fútbol.

Un libro: Dominique Lapierre: “Mas grandes que el amor”.

Disfruto como un niño con: Cocinar para las personas a las que quiero, pero sobre todo viendo como disfrutan con ello.

Una desilusión confesable: Ver la doble cara de algunas personas.

Mi mayor ilusión: Ser y hacer feliz.

Una manía: Limpieza y orden, si puede considerarse como tal.

En las personas, lo que más valoro es: la sinceridad.

No me gusta de las personas: la hipocresía.

Un deseo: Para todo el mundo: paz, tolerancia y respeto.
Para los míos: salud y felicidad.
Para mí: que quienes me rodean se sientan felices a mi lado